"Sin justicia ni libertad de expresión no habrá Cuarta Transformación", advertía el hombre historia de la prepa 7, Rafael Trejo Moreno
/ Ignacio
Hernández Meneses, (fotos y texto)
Acapulco; Guerrero, 20 d
septiembre de 2024.- En punto de las siete de la mañana, detrás del humo de
tus cigarros Delicados te aparecías hablándonos del mundo de la literatura, del
quehacer para transformar esa realidad de la desigualdad e injusticias. Tu
libre cátedra cimbraba el salón de la Prepa 7.
Pantalón de mezclilla y su
inconfundible playera desgastada con la imagen de dos brochazos de serigrafía
con el rojo carmín de la hoz y el martillo pegada a tu corazón, congruente con
tus principios, siempre a la izquierda.
Férreo comunista, nos guiaba con
la lectura, era necio abriéndonos brecha para el poder del conocimiento.
Subliminalmente tirabas línea, nos hablabas ya de lucha de clases, aunque algunos otros maestros se resistían a darnos clases.
Un septiembre como ahora, le pusiste el nombre a nuestra histórica Prepa 7 con el director al que todos conocimos afectuosamente como "El Diablo" (11 de septiembre 1973), defendiste a comerciantes, colonos, campesinos y estudiantes de la tiranía, era la época de la Guerra Sucia, de los vuelos de la muerte, de la desaparición de muchos estudiantes de la UAG.
Viviste en carne y hueso la
represión del figueroato, desaparecido y detenido injustamente por tus ideas.
Nunca bajaste la guardia en la
exigencia de la presentación con vida de los preparatorianos de la "Dr.
Salvador Allende Gossens".
Luchador social por excelencia,
sin ser regidor, diputado o senador te preocupó y te ocupó reformar la vida
política del país. Fuiste uno de los tabiques de lo que hoy es la República.
Siempre llegabas con volantes en
mano informando de la lucha del día, del USCUAG, del otrora combativo STAUAG.
Bajo el brazo, tu biblia
periodística el diario nacional "unomasuno" que a veces me prestabas
y más recientemente, “La Jornada". Eras de liderazgos sociales más
informados.
Hace algunos domingos nuevos, te
entrevisté varias veces y te escuché hablando con los compas que domingo a
domingo predicamos el Evangelio de la 4a.T, donde tus mensajes siempre estaban
cargados de historia, de realismo mágico, cifras, datos y citas.
Eras una biblioteca andando con
tu fina y elocuente oratoria.
En cada foto, una lectura, tu puño izquierdo en alto, a todo lo alto como si quisieras alcanzar los adornos de eso que llaman el nuevo kiosco del Zócalo rodeado de fritangas que manchan la plaza Juan Álvarez, cuyos comerciantes ambulantes tienen más fuero que un regidor porteño.
Maestro, ya lo estoy viendo en el
umbral del paraíso prometido. Hay un
desencuentro con el conservador de San Pedro porque no le permite hacer una
pinta en el cielo.
Usted reclamando sus derechos
irrenunciables y el déspota de Pedro tratando de excluirlo y hasta se esconde
las llaves.
El también maestro Nicolás Román
Benítez trata de tranquilizar a Pedro, ¿con qué autoridad moral discutes si
dicen que negaste al Señor tres veces? -le reprocha el viejo comunista y
candidato a la presidencia municipal de Acapulco, que en el 2018 ganó su hija,
la primera presidenta en la historia del puerto.
Pero se la estrategia, mi maestro
esperará que pase una nube y se le pegara en algún lugar, se hará de un arpa,
cantará "La Internacional", para que desde la clandestinidad del
paraíso pinte la hoz y el martillo.
¡Proletarios de todos los reinos,
uníos! Será la consigna.
Y desde aquí le daré el ultimo
brochazo con mi estopa roja.
Gracias por las clases de
dignidad, congruencia y firmeza que diste sin cansancio a decenas de
generaciones.
Hombre de lucha.
Ejemplo del hacer y pensar en la
izquierda, es la página que has escrito con tu vida.
Hoy, el cielo rojo es nuestro.
Hasta siempre Trejo.