*Denuncia rezago en su proceso por intento de asesinato, ante ineficiencia del Tribunal Federal en Acapulco
*Teme por su vida debido a la inacción de esas autoridades judiciales
/Verónica CASTREJÓN ROMÁN
Acapulco; Guerrero, a 15 de febrero de 2023.Luego de casi cinco años de pugnar por justicia, la chef Gloria Alejandra Mateos Jiménez, hizo un llamado a la presidenta del Tribunal Superior de Justicia de la Nación, Norma Lucía Piña Hernández, a que no sea omisa, en torno a su proceso legal que tiene un rezago de más de dos años en el Tribunal Colegiado Penal y Administrativo del Vigésimo Primer Circuito, cito en Acapulco.
En rueda de prensa celebrada en el estacionamiento del tribunal federal, Alejandra Mateos, con voz entrecortada y conteniendo el llanto, advirtió que teme por su vida, ante la ineficiencia del mencionado órgano judicial que impidió que su ex novio y victimario Víctor Manuel N, cumpliera su sentencia carcelaria, desde hace dos años y tres meses.
Detalló que en abril de 2018, su entonces novio Víctor Manuel N intentó asesinarla mediante estrangulamiento, por lo que puso la denuncia respectiva ante el agente del Ministerio Público, Pedro Araujo, quien tardó meses en tipificar el delito como tentativa de feminicidio, mientras que el juez Edgardo Mendoza Falcón tardó 466 días naturales en concederle la audiencia intermedia, violando sus derechos a una vida libre de violencia.
La denunciante explicó que dos años después, en febrero de 2020, en un juicio oral, la jueza Tanya Alfaro Zapata, “emitió una sentencia histórica en violencia de género en Guerrero” al declarar culpable a su agresor con una sentencia de seis años y medio de prisión; sentencia que fue ratificada por el magistrado Raymundo Casarrubias Vázquez.
“Entonces se le suspendieron sus medidas cautelares y le giraron orden de aprehensión; sin embargo, el 9 de noviembre de 2020, Víctor Manuel N, su agresor, inició un trámite de amparo federal ante el Tribunal Colegiado en materia Penal y Administrativa del Vigésimo Primer Circuito en Acapulco”.
Y por ese trámite, agregó Gloria Alejandra Mateos, su victimario no pudo ser detenido para que purgara su condena, porque “la ley lo asistía”. Lo anterior, dijo, a pesar de que el amparo no está firme y desde hace dos años y tres meses, este tribunal no se lo niega, pues su solicitud, después de todo ese tiempo, aún se encuentra en revisión.
Cuando Víctor Manuel N inició ese trámite de amparo, denunció, aprovechó la inacción de las autoridades judiciales para fugarse e ingresar ilegalmente a Estados Unidos con ayuda de familiares en Salt Lake City, “en donde en febrero de 2022 reincidió, según información del Idaho State Journal, medio que publicó que Víctor intentó matar a su novia, a la que estranguló hasta dejar inconsciente, tal como lo hizo conmigo, pero además golpeó a la amiga de su novia que intentó salvarla”.
Actualmente, continuó Gloria Alejandra, su victimario está preso en la cárcel del condado de Bannock, en Pocatello, pero después de pasar todo su proceso en prisión, ha aceptado todos los cargos de agresión, estrangulamiento y de su estancia ilegal en aquel país, “pues lo que intenta es ser deportado, porque sabe que en México va a recobrar su libertad, debido a que el Tribunal Colegiado en materia Penal y Administrativa del Vigésimo Primer Circuito en Acapulco ha retrasado todo”.
Enseguida reiteró la acusación directa en contra de esas autoridades judiciales, pues “su dilación al no negar aún el amparo que mi agresor inició en noviembre de 2020 le permitió huir y reincidir; ahora él pretende regresar y temo que lo haga para culminar lo que no logró en abril de 2018”.
Dijo que su expediente permanece “sepultado” y que no sabe si ello obedece a que su ex novio y agresor mantiene alguna relación que le procura impunidad, pues era trabajador del Instituto Electoral y de Participación Ciudadana de Guerrero, en Chilpancingo, en donde sucedieron los hechos que la dejaron al borde de la muerte.
“Temo por mi vida porque la sentencia de prisión en contra de Víctor, aquí en Guerrero, está suspendida porque este tribunal sigue sin negarle el amparo, pese a que hay un delito acreditado, una sentencia ratificada y un agresor reincidente, ¿cuánto tiempo más necesita este Tribunal Colegiado de Acapulco para negarle el amparo?”, cuestionó con voz temblorosa por la emoción.
“No quiero ser una estadística más”, suplicó, casi, Gloria Alejandra Mateos; recalcó que su victimario es un feminicida en potencia y que antes que a ella, agredió a otras siete mujeres que por miedo, se negaron a denunciar.
Se quejó porque durante estos casi cinco años “mi peregrinar en exigencia de justicia ha sido largo y desgastante y pareciera que es limosnero; es denigrante, doloroso, vil porque me hacen revivir una y otra vez lo que Víctor me hizo. No logró matarme, pero sí me arrebató parte de mi vida; el recuerdo y el dolor están aquí”.
Reiteró su llamado, este 15 de febrero, “Día de la Mujer Mexicana”, “para que mi caso sea escuchado en las más altas esferas del sistema de justicia mexicano, “para que yo no sea una más en las cifras; para que mi caso no quede en la impunidad”.
